Esta salsa nació de la inspiración de una estupenda botana de coliflor con Aioli de cilantro que probé en Bar Amá durante la más reciente visita de Mateo y Ana Paula aquí en Los Angeles. Esta salsa la combiné con lajas de coliflor horneadas y queso cotija y a mí me gustó muchísimo, más aún porque hornee la coliflor en lugar de freirla.
En esta receta sólo utilicé dos chiles de árbol para que no me saliera muy picosa, sin embargo, cada uno le pondrá la cantidad de chiles dependiendo su gusto personal.
Ingredientes
5 chiles de agua o “Anaheim”
2 chiles de árbol secos
1/4 de cebolla chica
1 taza de cilantro
1/2 taza de pepitas de calabaza
1 taza de aceite de oliva
jugo de medio limón (opcional)
Sal al gusto
Preparación.
1. Con unas tijeras o cuchillo corta el rabo de los chiles. Con tus dedos presiona el chile suavemente dejando salir todas las semillas. Coloca los chiles en un traste y cubre con agua caliente para que suavicen un poco.
2. Barniza los chiles de agua con aceite
3. Coloca los chiles sobre la hornilla para que se quemen por todos lados
4. Coloca los chiles en una bolsa de plástico, cierra y deja reposar por unos 10 minutos
5. Limpia los chiles bajo un chorrito de agua. Corta la parte superior del pabilo y ábrelos para retirar las semillas y venas.
6. En una licuadora coloca los chiles de agua limpios, los chiles de árbol, el cilantro, cebolla y sal. Licúa bien a formar una salsa. Si está muy espesa, puedes agregarle un poquito de agua.
7. En un sartén sin aceite coloca las pepitas y deja tostar un momento. Agrégalas a la salsa licuada
8. Prueba la salsa para checar el sazón. Puedes agregar aquí unas gotas de jugo de limón si deseas.
- 5 chiles de agua o “Anaheim”
- 2 chiles de árbol secos
- ¼ de cebolla chica
- 1 taza de cilantro
- ½ taza de pepitas de calabaza
- 1 taza de aceite de oliva
- jugo de medio limón (opcional)
- Sal al gusto
- Con unas tijeras o cuchillo corta el rabo de los chiles. Con tus dedos presiona el chile suavemente dejando salir todas las semillas. Coloca los chiles en un traste y cubre con agua caliente para que suavicen un poco.
- Barniza los chiles de agua con aceite
- Coloca los chiles sobre la hornilla para que se quemen por todos lados
- Coloca los chiles en una bolsa de plástico, cierra y deja reposar por unos 10 minutos
- Limpia los chiles bajo un chorrito de agua. Corta la parte superior del pabilo y ábrelos para retirar las semillas y venas.
- En una licuadora coloca los chiles de agua limpios, los chiles de árbol, el cilantro, cebolla y sal. Licúa bien a formar una salsa. Si está muy espesa, puedes agregarle un poquito de agua.
- En un sartén sin aceite coloca las pepitas y deja tostar un momento. Agrégalas a la salsa licuada
- Prueba la salsa para checar el sazón. Puedes agregar aquí unas gotas de jugo de limón si deseas.
Leave a Reply